jueves, 28 de octubre de 2010

¿Qué tan nebuloso desea su Negocio?

Quienes hemos interactuado desde hace décadas con las ahora llamadas "Tecnologías de la Información" o T.I. por sus siglas, aprendimos que era necesario contar con equipos de cómputo dentro de nuestra organización, para poder ejecutar sobre ellos nuestras aplicaciones y/u ofrecer servicios.

También era más que claro para nosotros que el Hardware era lo tangible (eso que estaba conformado por acero, aluminio, plástico, cobre silicio y demás materiales), mientras que Software era esa cosa intangible que para efectos prácticos se trataba de Sistemas Operativos, programas de cómputo y aplicativos que hacían funcionar a nuestro Hardware.

Ahora las cosas han cambiado bastante, pues gracias a la maravilla que es la Internet y todos los adelantos y artilugios que de ella se derivan, se han roto muchos paradigmas y conceptos que dábamos por inamovibles.

El primero de ellos es el del Hardware. Con la Virtualización ahora tenemos máquinas virtuales hechas de Software y no de materiales tangibles. Un servidor virtual se comporta exactamente igual que un servidor físico, pero ahora incluso ese servidor virtual además tiene características que la virtualización le confiere como son: portabilidad, independencia de hardware, etc.

El segundo es concerniente al Software, pues gracias al "Cómputo en la Nube" ya no requerimos de comprar licencias, instalarlas en Hardware comprado por nuestra compañía y viviendo en nuestra compañía.

Mas sin embargo entonces, ¿Cómo trabaja el Cómputo en la Nube? Veamos el siguiente Ejercicio Mental:

Para comenzar daremos por hecho que todos los que estamos viendo este Blog tenemos (obviamente) una cuenta en GMail, Hotmail, Yahoo, etc. Estos proveedores de servicio de correo electrónico por Internet no nos pidieron nada a cambio al crear nuestras respectivas cuentas de correo y, salvo en muy contadas y "escandalosas" ocasiones, nunca nos han fallado.

Ahora preguntémonos: ¿Necesité de tener algún Hardware o Software instalado en mi Compañía, mi Escuela o en mi Entidad Gubernamental para poder gozar de esos servicios? La respuesta como todos sabemos es un rotundo NO.

Pues esto que acabamos de analizar en este ejercicio mental no es otra cosa que el contar con un servicio que está siendo hospedado, ejecutado y servido en La Nube.

Sí. La nube es esa entidad abstracta que lo conforma Internet, los servicios que se ofrecen a través de ésta y todos los artilugios que la sustentan. Así pues podemos decir que quienes ya hemos trabajado con nuestras cuentas de correo gratuitas, lo hemos hecho siempre En La Nube.

Ahora imaginemos que no solamente el Servicio de Correo Electrónico lo tenemos disponible en esta modalidad, sino que ahora todas aquellas herramientas y servicios esenciales para nuestro trabajo los podamos acceder vía Internet.

Por ejemplo acceder así a nuestra herramienta para administrar nuestro relacionamiento con nuestros Clientes (CRM), nuestra herramienta para administrar y levantar nuestros pedidos (ERP), nuestra "suite" de escritorio para poder tener hoja de cálculo, procesador de textos, presentaciones electrónicas, etc. ¿Imposible? Hoy ya no.

Gracias al Cómputo en la Nube, un negocio no requerirá comprar Hardware, licenciamiento de Sistemas Operativos, Bases de Datos, Servidores de Aplicación, etc. Tampoco será necesario pagar costosos y lentos servicios de implementación y/o configuración. Ahora en esta modalidad solo pagamos por aquello que consumimos.

Para ninguno de nosotros resulta ajeno el pagar por lo que se consume de un servicio. Esto sucede en el día a día con el Suministro de Energía Eléctrica, el Sumunistro de Gas, el Suministro de Televisión de Paga, etc. ¿Por qué no entonces pagar por un Servicio de Suministro de Software?

A esto último precisamente se le conoce ahora como "Software As A Service" (software como servicio) y es algo que forma parte de la nube también.

¿Qué tenemos entonces? En primer lugar tenemos que la nube está sustentada por empresas e instituciones que ofrecen servicios a través de Internet.

Dichas empresas sí cuentan con Hardware, Sistemas Operativos y Software para ejecución de los Servicios y Aplicativos que ofertan. También cabe señalar que estas empresas, para hacer más ágil, efectivo y altamente disponible dichos servicios, echan mano de esa maravilla llamada Virtualización.

Del otro lado tenemos a quienes requieren y/o pagan estos servicios, que para poder accederlos solo necesitan de una aplicación sencilla ejecutándose en sus portátiles, equipos de escritorio y/o clientes ligeros.

Enmedio de todo esto tenemos a la omnipresente Internet, que como excelente medio de transporte de datos, voz y video, sirve como el medio ideal para que los proveedores puedan entregar los servicios contratados.

¿Qué resulta entonces de todo esto? Pues bien. Resulta que tenemos ante nosotros una revolución tecnológica que ha cambiado nuestra manera de trabajar y el enfoque de lo que son las Tecnologías de la Información. Además de esto tenemos el reto y por qué no la ventaja de hacer que nuestras Empresas, Entidades Educativas y Gobierno se suban a La Nube y aprovechemos todas las enormes ventajas que esta nos entrega.

Al final pues y en conclusión, solo basta con recordar que durante más de una década hemos utilizado la nube y nos hemos beneficiado con ella. Solo que ahora simplemente todo lo podremos hacer sobre ella con la misma seguridad y ubicuidad que ya gozábamos con nuestras cuentas de correo gratuito.

¿Está Usted preparado para La Nube?

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