viernes, 20 de julio de 2012

La internet de las cosas...

En entradas previas como "Entendiendo a Big Data (Parte I)" mencionábamos un término denominado como "la Internet de las cosas", en donde también se incluyó a este respecto que -"...son también responsables por agregar información a Big Data"-.

¿Qué es entonces "la Internet de las cosas"? Concretamente podemos decir que en computación, la Internet de las cosas se refiere a una red de objetos cotidianos interconectados.

La idea es muy simple pero su aplicación es difícil. Si todas las latas, libros, zapatos o partes de un vehículo estuvieran equipados con dispositivos de identificación minúsculos, la vida cotidiana en nuestro planeta sufriría una transformación.

Ya no existirían cosas fuera de stock o productos perdidos, porque nosotros sabríamos exactamente lo que se consume en el otro lado del planeta. El robo sería una cosa del pasado, sabríamos donde esta el producto en todo momento. Lo mismo se aplica a los paquetes perdidos.

Si todos los objetos de la vida cotidiana, desde una porción de yoghurt hasta un avión estuvieran equipados con etiquetas de radio frecuencia, podrían ser identificados y gestionados por equipos de la misma manera que si lo fuesen por seres humanos.

Con la generación de aplicaciones de Internet y la adopción del protocolo IPv6, se podría dar una identificación a todos los objetos, algo que no se puede hacer con IPv4 por su limitada cantidad de direcciones disponibles. De esta manera el sistema sería capaz de identificar instantáneamente cualquier tipo de objeto.

Solo para darnos una idea, el Internet de las cosas debe estar preparado para codificar de 50 a 100.000 millones de objetos y seguir el movimiento de estos. Lo anterior considerando que todo ser humano está rodeado de 1.000 a 5.000 objetos en su vida cotidiana.

Nótese que hasta el momento no hemos mencionado a la cada vez mas creciente pléyade de dispositivos "inteligentes" como televisores, teléfonos celulares, "tablets" y todos los que de por si ya están interactuando con la red.

Si ahora hacemos un análisis más profundo de todo esto, nos encontraremos ante un reto mayúsculo con sendas oportunidades de negocio.

Por un lado tenemos que pensar que para que esto pueda materializarse, requeriríamos infraestructura física para soportar los nuevos anchos de banda, adopción completa del protocolo IPv6, así como sistemas que permitan almacenar, analizar, estandarizar y depurar descomunales cantidades de información.

Se requerirán herramientas de software que permitan utilizar esta información de manera más que inteligente, así como nuevos paradigmas para hacerla discernible para el usuario común.

Cierto. Estamos hablando del futuro. Pero a diferencia de cuando en los años setenta se soñaba con la factibilidad de poblar los planetas con seres humanos, aquí todo esto se nos presenta como algo que es inminente y que sucederá en un futuro si no inmediato, sí a mediano plazo.

Las respuestas a las preguntas que pudiesen darnos una idea de qué tan corto o largo será el plazo de adopción son:

  • ¿Quiénes se beneficiarían con este concepto?
  • ¿Qué beneficios económicos aportaría a quienes lo adoptasen?
  • ¿Qué beneficios aportaría al Usuario Final?
  • ¿Cuáles serían las verticales de la industria que lo adoptarían de manera natural?
Como mencionamos no se trata de saber si Sí o No se adoptará el Internet de las cosas, sino mas bien cuánto tiempo tenemos los que estamos involucrados en las Tecnologías de la información para estar preparados.

¿Usted está preparado?

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